• Destaca el interés que muestran los médicos extracomunitarios, puesto que el 80% tienen predisposición para aprender o mejorar el conocimiento de la lengua.
  • El 54,7% de los médicos nacidos fuera de Cataluña han hecho algún curso de catalán. Entre los que no han hecho ninguno (45,3%), más del 90% consideran útil esta formación, pero lamentan que la oferta disponible hasta ahora no se ajusta a sus horarios y necesidades.
  • El catalán es la lengua materna del 37,6% de los médicos que ejercen en Cataluña, mientras que el castellano lo es del 52,2%.
  • El 87% de los médicos afirman que son competentes en la hora de entender el catalán y el 87,6% en cuanto a leerlo; pero el nivel de competencia baja cuando se trata de hablarlo (69,1%) y de escribirlo (61,4%).
  • El uso del catalán es más habitual entre compañeros que no en el acto asistencial y, en todos los casos, significativamente más frecuente a la demarcación de Girona, así como entre las generaciones de médicos de más de 45 años.

Dos de cada tres médicos nacidos fuera de Cataluña y que ejercen al sistema sanitario catalán (67%) quieren mejorar sus competencias en lengua catalana. Incluso los profesionales nacidos en Cataluña querrían perfeccionar sus habilidades en el uso del catalán (33,2%). Pero, si algún grupo manifiesta un interés mayoritario, este es el de los médicos nacidos a países extracomunitarios, puesto que el 80,1% de estos profesionales afirman que quieren mejorar su nivel de catalán. En cuanto a los nacidos en otras comunidades del Estado y en países de la Unión Europea, también tienen interés a mejorar las competencias lingüísticas en catalán (50,4% y 55,7%, respectivamente). Estos son algunos de los resultados obtenidos en el Estudio sobre las necesidades y conocimientos lingüísticos de los médicos a la asistencia sanitaria, elaborado por el Consejo de Colegios de Médicos de Cataluña (CCMC) a partir de una encuesta que respondieron el año pasado una muestra representativa de más de 1.300 profesionales colegiados en alguno de los cuatro colegios catalanes.

El interés para hacer formación de catalán queda muy patente en la encuesta, pero también que el principal escollo para poder hacerlo efectivo es la carencia de una oferta formativa suficientemente flexible, que se ajuste a los horarios y necesidades de los médicos. De hecho, el 45% de los médicos nacidos fuera de Cataluña no han hecho aún ningún curso de catalán, pero esto no quiere decir que no tengan interés, puesto que el 92% de estos profesionales creen que sería útil hacer y esgrimen la carencia de tiempo y de una oferta adecuada como obstáculos principales. De hecho, la mayoría de los que no han hecho formación (47,8%) afirman que van aprendiendo la lengua con el contacto del día a día.

Lengua materna y conocimiento del catalán

El catalán es la lengua materna (primera lengua hablada a casa desde pequeños) del 37,6% de los médicos que ejercen en Cataluña, mientras que el castellano lo es del 52,2%. Entre los nacidos en Cataluña, el catalán es la lengua materna del 62,8%. En el total del colectivo, el catalán como lengua materna está más presente en la franja de edad de 56 a 65 años (48,2%), mientras que el mínimo se registra en la franja de 36 a 45 años (26%). Esto se corresponde con el hecho que, en la franja de edad de los 30 a los 44 años, los médicos colegiados en Cataluña nacidos en el extranjero superan el 40% y los nacidos en otras comunidades del Estado español se acercan al 20%. La composición de la pirámide de edad de los colegios de médicos ha cambiado mucho los últimos años, con la entrada de muchos médicos de origen extranjero que contribuyen a garantizar el relevo generacional de los médicos que se jubilan. Una tendencia que plantea también un reto en el ámbito lingüístico.

En cuanto al conocimiento y a las habilidades en catalán que declaran los médicos las diferencias son claras entre las habilidades activas (hablarlo y escribirlo) y las pasivas (entenderlo y leerlo). Mientras que el 87% de los médicos encuestados afirman que entienden el catalán y el 87,6% que lo saben leer, el porcentaje de los que los saben hablar baja al 69,1% y los que lo saben escribir son el 61,4%.

El factor del lugar de nacimiento está estrechamente relacionado con el nivel de dominio del catalán. El 98,6% de los médicos nacidos en Cataluña dominan las habilidades activas y el 94,5% las pasivas. Los médicos nacidos en el resto del Estado tienen buen nivel de habilidades pasivas (88,8%) y la mitad (50,7%) también tienen en cuanto a las activas. Los nacidos en la Unión Europea también tienen buenas habilidades pasivas (70,9%), pero bastante menos de las activas (22,7%). Por último, los médicos nacidos en países extracomunitarios son los que presentan niveles más bajos de habilidades en catalán: el 56,6% lo entienden y lo leen, pero solo el 9,8% lo hablan y lo escriben. Este último grupo también suele ser el que lleva menos tiempo viviendo en Cataluña.

Hay que destacar que, más allá del origen, el factor más determinante en la hora de lograr habilidades lingüísticas es el tiempo de residencia y trabajo en el país. La encuesta también muestra que uno de cada cuatro médicos extranjeros no conocían la oficialidad del catalán en Cataluña en el momento de su llegada.

Uso del catalán a la asistencia (acto médico y entre compañeros)

Menos de la mitad de los médicos (47,8%) emplean el catalán de manera habitual para comunicarse con los pacientes durante los actos asistenciales. El uso de la lengua catalana durante el acto médico es bastante menos frecuente entre las generaciones jóvenes de médicos (sobre todo a la franja de 30 a 45 años), coincidiendo con  porcentajes  más  elevados  de  médicos  nacidos  fuera  de  Cataluña, especialmente a países extracomunitarios. Por ámbitos territoriales, destaca la diferencia entre la demarcación de Girona, donde se registra el máximo uso del catalán durante el acto médico (70% de los médicos lo emplean habitualmente), y la de Barcelona, donde baja al 45,6%. En la demarcación de Lleida, el porcentaje es del 64,7% y a Tarragona, del 60,5%. También por edades se observan diferencias significativas: del 75,7% de los médicos de 60 años o más que emplean el catalán habitualmente a tan solo el 30,1% a la franja de 30 a 44 años.

El 55,3% de los médicos afirman que, mayoritariamente, se dirigen inicialmente al paciente en catalán y, de estos, el 63% cambian automáticamente de lengua si la respuesta es en castellano; el 15,2% piden al paciente si los entiende en catalán y el 20,8% continúan en catalán si comprueban que el paciente los comprende. En cuanto al 43,1% que se dirigen inicialmente al paciente en castellano, el 45,6% cambian al catalán si es la lengua del paciente; el 11,1% preguntan si los entiende en castellano y el 41,4% mantienen el castellano si perciben que los entiende.

En cuanto a la relación entre compañeros, el uso habitual del catalán es algo más elevado y llega al 55,6%. El 41% de los médicos afirman que prefieren que los compañeros les hablen en catalán y el 14,6%, en castellano, mientras que al 44,4% los resulta indiferente. Teniendo en cuenta el origen, los médicos nacidos en Cataluña prefieren relacionarse en catalán (62,2%), mientras que más de la mitad de los médicos nacidos fuera de Cataluña manifiestan que los es indiferente que los compañeros los hablen en catalán o en castellano.

A pesar de que la mayoría de los médicos procedentes de fuera de Cataluña no tienen inconvenientes en que los compañeros se dirijan en catalán, es frecuente que el profesional catalanohablante cambie de lengua de manera automática ante un interlocutor castellanohablante. El 74,9% de los que se dirigen en catalán a un compañero acostumbran a cambiar al castellano cuando esta es la lengua empleada por el interlocutor. Una realidad que se corresponde con el 77,2% de los médicos que afirman que sus compañeros dejan de hablarles en catalán cuando ellos los hablan en castellano.

Acciones y propuestas desde el CCMC

Los resultados de la encuesta del CCMC muestran que existe buena predisposición para mejorar las competencias en catalán por parte del colectivo médico, especialmente entre los médicos procedentes de países extracomunitarios, que son los que presentan niveles más bajos de habilidades lingüísticas, tanto activas como pasivas, entre otros de otras razones, porque muchos de estos profesionales hace pocos años que viven y trabajan en Cataluña.

La demanda de formación de catalán existe, pero los médicos manifiestan que la oferta actual no es adecuada ni bastante accesible, sobre todo porque no ofrece suficiente flexibilidad para adaptarse en sus horarios y necesidades.

“El uso de catalán se tiene que fomentar en todos los ámbitos y, especialmente, desde la administración. Pero todos podemos contribuir: los profesionales sanitarios y los pacientes que habitualmente nos expresamos en catalán también contribuimos a facilitar el aprendizaje si mantenemos la lengua. Por otro lado, hay que ser sensibles con los profesionales que acaban de llegar a Cataluña y que necesitan un tiempo de adaptación, rehuyendo el conflicto ideológico y las posturas inflexibles. Hay que aprovechar la buena predisposición en el aprendizaje y favorecerlo en positivo”, afirma el presidente del CCMC, Josep Vilaplana, ante los resultados obtenidos a la encuesta.

Teniendo en cuenta que la competencia lingüística es fundamental para un buen acto médico, el CCMC reclama que la administración ponga al alcance de los médicos una oferta formativa gratuita, flexible e interactiva, que tenga, además, en cuenta el conocimiento de vocabulario específico del ámbito sanitario y asistencial. Por otro lado, las entidades contratadoras también tienen que mostrar compromiso, apoyar y facilitar esta formación, que, habitualmente, se tendrá que desarrollar en horarios laborales.

Para dar respuesta efectiva a la situación, hace falta el compromiso firme del Departamento de Salud, que tiene que contribuir de manera efectiva con oferta formativa para el colectivo médico. Del total de plazas que ofrecida el Consorcio de Normalización Lingüística (CNL) en el año, habría que reservar 1.600 solo para los médicos que llegan cada año a Cataluña procedentes otros países. Una oferta que tendría que ser claramente superior si se tiene en cuenta los profesionales llegados en años anteriores que todavía no han podido acceder en ninguna plaza de formación.

Los colegios de médicos catalanes, mediante el Instituto de Formación Médica y Liderazgo (IFMiL) ya han puesto al alcance de los médicos procedentes de fuera de Cataluña que se incorporan al sistema sanitario el curso de Iniciación a la lengua catalana y el curso Ejercer como médico en Cataluña. Qué hay que saber? El CCMC también ha puesto a disposición del Departamento de Salud su infraestructura para acompañar los profesionales y facilitarlos el aprendizaje de la lengua. Por otro lado, los colegios han impulsado el proyecto de voluntariado Parejas lingüísticas.

Desde los colegios, también se analizan, caso por caso, las quejas ciudadanas recibidas en referencia al uso de la lengua. Justo es decir que los casos de conflicto son puntuales, aunque muy mediáticos.

Dominio de las habilidades lingüísticas en catalán y castellano de los médicos/eses que trabajan en Cataluña

Médicos/as que querrían mejorar su nivel de catalán (o aprender), según lugar de nacimiento

Lengua asistencial, según franjas de edad

Fuente: Estudi sobre les necessitats i coneixements lingüístics dels metges a l’assistència sanitària. CCMC.