¿Tienes un ordenador portátil viejo y no sabes qué hacer con él? ¿Sabes que alguien podría beneficiarse de este aparato? Este es el objetivo del Proyecto SustainComp que ha puesto en marcha la URV Solidaria y el Centro de Recursos para el Aprendizaje y la Investigación (CRAI ) con la plataforma Labdoo.

 

¿Quieres conocer cómo funciona? Sigue leyendo la entrevista que desde el COMT les hemos hecho!

 

¿En qué consiste el Proyecto SustainComp URV?

En el mundo se retiran cada año millones de portátiles que aún se encuentran en condiciones de dar servicio. Simplemente saneando los mismos y cargándolos con software educativo, pueden convertirse en una herramienta muy poderosa para desbloquear la brecha digital educativa en todo el mundo. El proyecto se ejecuta simplemente con la buena voluntad de las personas a través de la contribución con su tiempo (la colaboración global) recogiendo, saneando y transportando los ordenadores, y con los recursos no utilizados, tales como ordenadores portátiles o espacio de equipaje de los viajeros y, por tanto, no es necesaria inversión económica para llevar a cabo el objetivo. Asimismo no se producen emisiones de contaminantes adicionales, dado que se aprovechan viajes programados para otras funciones.

 

¿Qué papel juega la plataforma Labdoo en este proyecto?

La plataforma Labdoo (www.labdoo.org) es la red social mundial (de origen catalán) a través de la cual se coordinan todos los procesos y se intercambia libremente toda la información tanto técnica como de stocks, así como de posibles desplazamientos. Cualquier persona interesada puede inscribirse y ejercer alguna de estas funciones; puede ser donante, saneador/a, viajero/a, etc.

Podríamos decir pues que nuestros equipos informáticos pueden tener una ‘segunda oportunidad’, ¿verdad?

Un ordenador que muchos de nosotros no nos sirve para las tareas profesionales o académicas del día a día por la exigencia cada vez mayor de software específico, una vez saneado y preparado adecuadamente puede ser muy útil para que un / a estudiante pueda utilizar -el para conectarse a la red y utilizar software sencillo que le permita continuar sus estudios. Para el caso de lugares donde no existe la posibilidad de conexión, los ordenadores los preparamos incorporando bases de datos educativas libres. Un ejemplo es la inclusión de todo el contenido de la Wikipedia. Es una lástima acumular ordenadores en desuso que pueden ser muy bien aprovechados.

 

Si yo quiero dar mi portátil, ¿cómo lo hago?

Tienes dos vías; contactar directamente con la plataforma www.labdoo.org o directamente con la URV Solidaria (www.urv.cat/urvs) si tu ubicación es cercana a Tarragona.

¿Qué requisitos deben tener los portátiles que te llegan?

Los equipos deben poder ponerse en marcha, deben tener el teclado completo, deben disponer de un mínimo de 1 GB de RAM y deben tener el transformador de corriente. La batería no es imprescindible. En líneas generales el equipo no debe estar dañado. Hay que tener en cuenta que las personas voluntarias no reparan sino que condicionan los equipos. Cuando los equipos están demasiado dañados, se aconseja a la persona donante que la mejor opción es el reciclaje.

 

Y cuando os llegan, ¿qué es lo que se les hacen?

Existe todo un proceso que está estipulado y codificado en la plataforma. En primer lugar se hace una revisión visual, después se limpia el equipo (y actualmente se desinfecta), seguidamente se codifica dentro de la plataforma y se identifica el donante (que recibirá en todo momento información del estado de su equipo). Una vez codificado, se pone en marcha y si el equipo funciona, se procede a su acondicionamiento con el formateado del disco duro para hacer un borrado seguro y definitivo de cualquier vestigio de información anterior. A partir de ahí se le instala un sistema operativo y software educativo libres y queda preparado para un nuevo uso.

 

Una vez terminados, ¿Cómo llegan a los nuevos propietarios?

Los equipos quedan almacenados y a la espera de encontrar viajeros que se desplacen a los lugares de demanda de equipos (pensemos que es una red mundial). Cuando este vínculo se produce, el viajero recoge el equipo (o equipos) y los transporta como parte de su equipaje. Cada una de estos pasos produce cambios en la trazabilidad del equipo que va cambiando de estado dentro de la red.

 

Además, tanto el donante como al gestor, se les permite saber en todo momento en qué fase del proceso se encuentra su equipo, ¿verdad?

Efectivamente, a través de un sistema de etiquetado se sabe en qué estado se encuentra cada equipo. Hay diferentes nomenclaturas:

S0= etiquetado, S1= dado, S2= saneado, S3= asignado, T1= en tránsito, S4= entregado, S5= deteriorado/averiado S6= reciclado

Cada vez que este etiquetado cambia, el donante recibe un correo electrónico.

Hasta la fecha ¿cuántos aparatos se han recibido, cuántos se han entregado y donde?

Mundialmente y desde el nacimiento de la plataforma se han entregado 19.087 unidades. Por parte de la URV Solidaria (SustainComp) teniendo en cuenta nuestra reciente incorporación que coincide con la pandemia asociada a la Covid-19, unas setenta unidades.

 

A escala local ¿Cuánta gente se ha beneficiado de esta iniciativa solidaria?

Coincide con el número de unidades entregadas. Lo que sabemos es que en muchos casos una sola unidad que llega a una familia puede favorecer la tarea de estudio de más de un niño o niña.

 

La Covid 19 ha puesto de manifiesto una carencia de recursos en muchos ámbitos. Como ha afectado ‘en el proyecto? Ha notado un incremento de la demanda? ¿Cuál ha sido la respuesta de la gente a la hora de dar sus aparatos informáticos?

La Covid-19 nos ha perjudicado organizativamente para que el número de personas voluntarias es más reducido de lo que quisiéramos y, por otro lado, nos ha restringido mucho la movilidad. Por otra parte nos ha permitido darnos cuenta de la gran brecha tecnológica existente en nuestro país. Ha sido una sorpresa descubrir la gran cantidad de familias que no disponían de recursos técnicos para que los niños / as pudieran seguir sus estudios a distancia.

La respuesta de la gente va muy ligada a la difusión mediática que se hace del proyecto, de tal manera que observamos claramente como cada vez que se promueve hay personas que nos contactan para dar equipos.

 

¿Qué feedback ha recibido de las escuelas/usuarios que se han beneficiado de la URV SustainComp?

La respuesta es muy gratificante. Los profesionales agradecen la recepción de equipos para que determinados estudiantes no se queden descolgados de sus estudios, de tal manera que se establece una dinámica permanente en cuanto a la demanda/recepción de equipamiento. Los centros receptores suelen, a la vez, involucrarse en el proyecto incentivando la donación en su entorno. También tenemos mensajes directos de estudiantes expresando su agradecimiento. En algunos casos muy emotivos.

 

De momento trabajáis con ordenadores portátiles, planeáis ampliar el abanico de aparatos electrónicos ya sea con tabletas u ordenadores de sobremesa?

Consideramos que el proyecto acaba de empezar. Tenemos muchas expectativas que pasan, entre otros aspectos, para incluir equipos de sobremesa. Sin embargo, con las condiciones actuales de prevención asociadas a la Covid-19, hay que ser prudentes y adaptarnos a unas dimensiones sanitariamente alcanzables.